El año pasado os presentamos las consideradas mejores 20 playas de España. Durante este verano vamos a ampliar y a enumeraros las mejores playas por Comunidad Autónoma. Después de visitar GALICIA, vamos a un litoral que os sorprenderá por sus formas y paisajes y sus aguas cristalinas, llamando especialmente la atención su cercanía a la montaña, así como sus diferentes atractivos en función de las mareas: hablamos de ASTURIAS.
ASTURIAS (1ª Parte)
PLAYA DEL SILENCIO – Cudillero
La magia del silencio del mar, el lugar donde el rugir del Cantábrico se convierte en arrullo. Esto es la playa del Silencio, una concha protegida por acantilados e islotes de diversos tamaños que aplacan la fuerza del mar y que hacen de este lugar, probablemente, uno de los más bellos de Asturias.
Con un acceso a pie de unos 500 metros, mediante numerosas escaleras, esta ensenada de claros cantos rodados es un paraje casi virgen, aunque muy visitado. No dispone de servicios, y quizá por ello su belleza se conserva intacta y está frecuentada por naturistas.
PLAYA DE CUEVAS DEL MAR – Llanes
En la desembocadura del río Cuevas, existe una playa salpicada por enormes formaciones rocosas perforadas por el mar que dejan al descubierto cuevas y túneles. Se trata de un paisaje kárstico de gran belleza.
Cuevas de Mar es un arenal muy turístico, con un alto nivel de ocupación, cercano a Nueva de Llanes. Es de arena blanca y registra un oleaje moderado, aunque su baño no es peligroso, y se abre en forma triangular.
Dispone de un amplio aparcamiento, buenos equipamientos y un área recreativa.
PLAYA DE RODILES – Villaviciosa
El parque-playa está enclavado en la Reserva Natural de la Ría de Villaviciosa y forma parte del Paisaje Protegido de la Costa Oriental.
Rodiles dispone de una extensa zona arbolada de pinos y eucaliptos y de un paseo marítimo de madera por el margen de la ría que lo transforman en un arenal único.
Con más de un kilómetro de longitud y 300 metros de ancho, que sufren grandes variaciones con las mareas, es una de las playas más grandes y una de las más concurridas, también para los aficionados a los deportes acuáticos, como el surf y a la pesca. Es una zona muy abierta, con fuerte oleaje.
Dispone de transporte público, además de un aparcamiento controlado y campings en sus inmediaciones.
PLAYA DE CADAVEDO / LA RIBEIRONA – Valdés
Era un antiguo centro ballenero en la época medieval que ahora goza de un indudable atractivo turístico. Esta playa, que toma su nombre del pueblo más cercano, se extiende con la forma de una concha cubierta por cantos rodados y arena, en un entorno rural.
El arenal es ventoso y el oleaje que llega al litoral es moderado.
El acceso en coche es sencillo, a través de una carretera desde Cadavéu. Además, dispone de un amplio aparcamiento. Estas facilidades hacen que su ocupación en verano sea elevada.
PLAYA DE POO – Llanes
Esta playa con forma de embudo, desde la que es difícil atisbar el mar al fondo de los acantilados, reposa en la desembocadura de un pequeño arroyo llamado Río Vallina. Cuando la marea sube, el mar entra por la canal que se ha formado con el paso de los siglos y queda remansada como si se tratase de una piscina de poca profundidad. Todas estas características hacen que sea un arenal familiar, ya que el baño es muy seguro.
El acceso a este arenal se puede realizar en coche o a pie desde Po. Cuenta con un pequeño aparcamiento insuficiente para su alto nivel de ocupación y está rodeada de praderas.
PLAYA DE BALLOTA – Llanes
Es la hermana tranquila de la playa de Andrín. Separadas solo por el mirador de la Boriza, Ballota disfruta de unas aguas tranquilas con poco oleaje y una arena fina y blanca. El conjunto que forma junto con el islote del Castro es de espectacular belleza.
Ballota tiene como peculiaridad un potente bufón activo en los días de oleaje. En pleamar, la zona de arena se cubre casi por completo dejando como resultado una playa de bolos y rocas. No dispone de muchos equipamientos y su acceso es sencillo y está frecuentada por naturistas.
PLATJA PENARRONDA – Castropol y Tapia de Casariego
La playa de Penarronda la comparten los concejos de Castropol (Barres) y Tapia de Casariego (Santa Gadía). Dividida por el arroyo de mismo nombre, Penarronda es única: cuenta entre su flora con Malcomia littorea, es decir, alhelí de mar, una especie en peligro de extinción, que no está presente en ningún otro lugar de Asturias.
Además, destaca por su singular belleza, en forma de concha alargada y con una roca redonda en el centro que da nombre a la playa. Tiene buenos equipamientos, es ventosa y con fuerte oleaje, lo que la hace perfecta para la práctica del surf.
En Tapia de Casariego se accede por Santa Gadía y en Castropol por la localidad de Barres. Forma parte de la Reserva de la Biosfera Río Eo, Oscos y Terras de Burón.