Pueblos de Cataluña que debes visitar: Begur

Hay dos Cataluñas, la metropolitana y la rural. Ambas muy diferentes y todas con encanto, pero si sois de los que os gusta la tranquilidad, la naturaleza y la historia, la Cataluña rural os gustará más.

En esta serie de artículos, donde ya hemos hablado de Pals, Espinelves, Cadaqués, Rupit, Besalú, Tossa de Mar y Bagergue, os presentaremos pueblos de la Cataluña rural, de costa, de interior o de montaña, que, por sus características, debéis apuntarlos en mayúsculas en vuestra libreta de futuros destinos, a los que dedicar una ruta o un fin de semana con vuestra autocaravana.

Seguro que nos dejamos muchos pero estos son, a nuestro parecer, algunos de los más recomendables.

Hoy viajamos a un pueblo marítimo, situado en el corazón de l’Empordà: Begur.

Begur

Situado en el corazón del Empordà, el pueblo de Begur y sus playas configuran uno de los lugares más maravillosos de la Costa Brava.

Su término municipal está formado por un conjunto de colinas llamado Massís de Begur, y un extenso litoral, bañado por el mar Mediterráneo.

Tanto el casco antiguo de Begur, formado por múltiples monumentos que han quedado como legado de los momentos más significativos de su historia; como el pequeño núcleo románico de Esclanyà, o las ocho calas y pequeñas playas que pertenecen a Begur, configuran un conjunto, y un entorno paisajístico, inigualables.

Begur es un pueblo con una profunda personalidad histórica. Al abrigo de su castillo medieval, coraleros, pescadores, indianos y artesanos del corcho han protagonizado brillantes páginas de una historia que se refleja en cada calle, en cada casa y en cada rincón del pueblo.

La imagen más conocida de Begur es sin duda el castillo medieval que preside el municipio, pero encontramos también otros lugares interesantes para visitar, como las numerosas casas indianas (edificios de estilo colonial, construidos por begurenses que el siglo XIX emigraron a “las Américas “huyendo de la crisis económica del momento, y que regresaron posteriormente con una importante fortuna), las torres de defensa del siglo XVI (legado del tiempo en que los piratas navegaban por el Mediterráneo y construidas por los begurenses como medio de refugio contra sus asaltos ), la iglesia (edificio de estilo gótico dedicado a San Pedro) u otros edificios históricos como el Casino Cultural o las Escuelas Viejas.

 

Esclanyà

Esclanyà forma parte del municipio de Begur, y se encuentra situado en el sector noroeste del término municipal. Hasta finales de la edad media fue una posesión del señor de Cruïlles.

El pueblo se estructura en torno a la iglesia de Sant Esteve d’Esclanyà, citada documentalmente en el año 1280. La iglesia contiene elementos propios de diferentes épocas del románico desde el siglo X, lo que permite indicar la existencia de un templo anterior. Su castillo, conocido popularmente como la torre de Esclanyà, es una edificación del siglo XIV. En la actualidad se conserva la gran torre de planta rectangular, de época románica, con unas almenas en el lado norte.

Tradicionalmente la economía de Esclanyà se fundamentó en el cultivo de las viñas y los olivos. La producción de azulejos representó la principal actividad industrial.

 
  


Caminos de ronda

Otra singularidad especial de Begur son sus caminos de ronda y sus calas. Se trata de caminos que bordean la costa y que han tenido diferentes usos a lo largo de la historia: acceder a las calas en caso de naufragio, vigilar el horizonte para evitar ataques piratas y, incluso, (controlar el contrabando y la estraperlo) hacer contrabando en tiempos de la posguerra. Actualmente, se puede pasear, disfrutar con tranquilidad del paisaje costero y acceder a las calas escondidas donde tiempo atrás ocurrían hechos cotidianos. En Begur hay 3 tramos de camino de ronda diferenciados y que unen diferentes calas y playas.

 

Casas indianas

CAN SORA: En la Porxada se conservan frescos de paisajes románticos. Fue construida entorno en 1870 cuando la familia Cama-Martí volvió enriquecida de La Habana. En el interior del porche se conservan frescos que representan paisajes románticos de las tierras americanas. En la reja de la puerta de la puerta se pueden ver las iniciales JC que corresponden a José Pierna Rovira, primer propietario del inmueble.

CASA BONAVENTURA CANER BATALLER: La composición arquitectónica de la casa es neoclásica. Fue construida en 1866 por el begurense Bonaventura Caner Bataller, que emigró a Cuba en 1845. Al volver a Begur invirtió parte de su fortuna en la industria del corcho. La composición arquitectónica de la casa es neoclásica con unos pilares de piedra en la planta baja que continúan en los pisos superiores.

CAN PI: Pere Pi Carreras, junto con su hermano pequeño José, emigraron hacia Cuba donde abrieron una tienda de comestibles, negocio que complementaban con importaciones y exportaciones relacionadas con la industria del corcho. Esta casa mantiene vivo uno de los rasgos más característicos de las casas indianas de la calle Bonaventura Carreras, la costumbre de tener un huerto en la parte sur.

MAS CARRERAS: Es una casa majestuosa de estilo indiano. Fue construida en la segunda mitad del siglo XIX por José Carreras Frigola, comerciante de Begur que emigró a Santiago de Cuba en 1831. Es una casa majestuosa de auténtico estilo indiano con habitaciones muy amplias y curiosamente adornadas. En su interior había una torre del siglo XVI que se derribó cuando se construyó la casa.

CASA TÉRMENS: Fue edificada en 1869. Era propiedad de Santiago Mauri Carreras, el cual abrió una tienda de tejidos en Santiago de Cuba destinada a proveer al ejército español. Cabe destacar las molduras de la planta baja, y los pilastras acanalados del primer piso y las barandillas de hierro de los balcones.

CASA VICENÇ FERRER BATALLER: Casa de estilo modernista. Construida entorno en 1887 por el indiano Vicente Ferrer Bataller que emigró a Cuba en 1856, donde se dedicó a la industria del tabaco y el comercio de harinas. La ornamentación de la casa, las barandillas y las rejas son modernistas con esgrafiados y dibujos que hacen referencia a motivos naturales.

CASA PERE ROGER: Fue comprada en 1859 por Pere Roger y Puig al indiano Josep Carreras Frigola. Pere Roger emigró a Cuba, donde fundó una fábrica de tabaco en la zona de Santiago de las Vegas. En las paredes y techos interiores se conservan dibujos y frescos de temática y estilo plenamente indianos, y en el porche que da al patio hay frescos de temática marina.

CASA RAMÓN SILVESTRE DARDER: Fue construida en 1887 por Ramon Silvestre Darder. Ramón, junto con sus hermanos Josep y Joan, emigraron a Cuba entre 1835 y 1840. Era habitual que el indiano dejara huella en la casa, las iniciales de su nombre aparecen en el dintel de las puertas, a las reías o balcones.

CASA PACO FONT: Se considera la última casa de indianos construida en Begur, que data de principios del s. XX. Fue edificada bajo la influencia del modernismo, presente en el mosaico que decora los marcos de las puertas y ventanas. Era propiedad de Francisco Font, que en 1889 emigró a Ponce (Puerto Rico) por motivos militares, como voluntario.

CASA PERE CORTADA SABATER: En Pere Cortada nació en 1815 e inició la aventura americana a mediados de los años 30, junto con sus hermanos Manuel y José. El destino fue Santiago de las Vegas y Matanzas, donde se dedicaron a los negocios. De esta casa destacan las pinturas murales, que decoran las partes de toda la planta noble

CASA DEL SEÑOR PUIG: Edificada bajo la influencia estética hindú. Fue construida en 1872 por Sebastián Puig Carreras que, pese a no “hacer las américas”, edificó la casa bajo la influencia estética hindú. La fachada está pintada con frescos que reproducen un paisaje ultramarino donde predominan los colores azules y ocres.

CASA JOSEP PI CARRERAS: Casa de estilo neoclásico. Edificada en 1860 por Josep Pi Carreras. Él y su hermano Pedro abrieron en La Habana una tienda de comestibles llamada La Industrial y una panadería. En la parte posterior de la casa se conserva una galería con vistas al jardín.

CASA DE JOSEP FORMENT: Josep Forment, que emigró a La Habana en 1845, la construyó en 1866 al volver a Begur con una posición social notable. En la barandilla del balcón se pueden ver las iniciales JFP, que corresponden a Josep Forment Pi. La fachada es de estilo neoclásico, con unos sillares en la planta baja y unos pilastras que recorren los dos pisos superiores.

CASA DE LA VILA: Casa construida en 1902, momento en que ya se había producido el retorno masivo de begurenses de América. Pese a no tener constancia de que su propietario fuera indiano (que hubiera hecho las Américas), la casa recoge diversos elementos de estética hindú como motivos florales en las puertas o decoraciones de espesor pintadas.

CAN PETU (CASA PERE PONT): Pere Pont Puig, promotor de la casa, emigró a Ponce (Puerto Rico) donde se dedicó al comercio. Al volver a Begur se hizo construir, en 1889, una casa señorial para vivir con su esposa Joaquina Carreras y su familia.

Feria de Indianos

La feria celebra, a principios de setiembre, la intensa relación entre Cuba y Begur, que tiene su origen en la emigración de muchos begurenses en la isla a lo largo del siglo XIX. Al retornar al pueblo, aquellos que habían prosperado en sus negocios, construían ostentosas casas que todavía hoy decoran las calles de Begur. Eran los populares “americanos”, que pretendían recrear el estilo de vida de Cuba y que nos dejaron un diverso legado cultural.

El primer fin de semana de septiembre, Begur se transforma para revivir aquel periodo histórico que ha dejado una profunda huella en nuestra villa y en nuestra identidad. Las calles y plazas de Begur acogen un mercado de productos de ultramar, muestras de oficios y actuaciones musicales. La Feria se abre con la inauguración oficial por parte de autoridades políticas y personas vinculadas al mundo indiano.

Durante el transcurso de la Feria se programan diversas actividades musicales. El viernes, primer día de la Feria, en el fantástico marco del patio de las Escuelas Viejas, nos acompaña cada año una figura estelar diferente, como han sido: Lucrecia, Chano Domínguez, Pepe Rubianes o Moncho, entre otros.

Los ritmos caribeños, con grupos cubanos de renombre internacional, como Barnahabana o la Máquina del Sabor, aseguran la juerga y la diversión del público más exigente.

Tampoco faltan las habaneras ni los espectáculos de calle, con recreaciones de la época indiana. Todo ello se complementa con una serie de actividades culturales: exposiciones, visitas guiadas, entrevistas, conferencias, documentales o mesas redondas, que analizan y divulgan este legado de los “americanos”.


¿Dónde pernoctar con autocaravana en Begur?


Hasta aquí nuestro resumen del precioso pueblo empordanès de Begur.

Esperamos que hayamos despertado vuestra curiosidad y descubráis esta zona en alguna de vuestras futuras salidas.

Estad atentos a nuestras redes sociales para descubrir nuevos pueblos que no os podéis perder en Cataluña.

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Imágenes y información de visitbegur.cat y wikipedia

 

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