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Pueblos de España que no te puedes perder: Morella, Castellón
jul
¡Bienvenidos a nuestro blog sobre Morella, una joya histórica en el corazón de España! En esta emocionante aventura virtual, te guiaremos a través de los encantos de esta ciudad medieval, situada en la provincia de Castellón, donde el pasado y el presente se entrelazan en una danza fascinante.
Morella, con sus impresionantes murallas y su imponente castillo, es un destino que te transportará en el tiempo. Sus calles adoquinadas, edificios centenarios y una atmósfera que parece salida de un cuento de hadas, hacen que cada paso sea un viaje a través de siglos de historia.
Además de su rica herencia histórica, Morella también es famosa por su belleza natural. Rodeada por majestuosas montañas y colinas, esta ciudad ofrece paisajes asombrosos que te dejarán sin aliento. Desde senderos serpenteantes hasta parajes de ensueño, los amantes de la naturaleza encontrarán aquí un paraíso por explorar. Desde enero de 2013, Morella forma parte de la red LOS PUEBLOS MÁS BONITOS DE ESPAÑA, y declarada Bien de Interés Cultural.
Ya seas un viajero solitario en busca de inspiración, una pareja romántica en busca de escapar de la rutina o una familia ansiosa por crear recuerdos, Morella te recibirá con los brazos abiertos. ¿Estás listo para descubrir los misterios de este cautivador destino? Acompáñanos en esta aventura y déjate cautivar por el encanto medieval de Morella. ¡Comencemos!
El castillo
El imponente Castillo de Morella se erige majestuosamente sobre un mar de montañas, y a lo largo de los siglos, ha sido una de las fortalezas más destacadas en todo el Mediterráneo. Con una historia que se remonta al III Milenio antes de Cristo, este asombroso monumento ha sido testigo del paso de numerosas civilizaciones que dejaron su huella en su construcción.
Situado estratégicamente y construido aprovechando la roca natural, este enclave militar se convirtió en un lugar de gran importancia y encanto. Su inigualable ubicación le permitió desempeñar un papel crucial en el dominio y control del paso entre el interior y la costa, haciendo de él una fortaleza inexpugnable.
La muela, donde se asienta el Castillo actual, ha sido habitada desde tiempos antiguos, albergando vestigios del Neolítico, la Edad del Bronce y del Hierro. Posteriormente, con la llegada de romanos, visigodos, árabes y, finalmente, cristianos, el Castillo evolucionó y se transformó según las diferentes civilizaciones que lo ocuparon.
Tras la conquista cristiana a los árabes y las reformas realizadas entre los siglos XIII y XIV, el Castillo sufrió cambios marcados por los avances tecnológicos en el arte de la guerra.
Además de su rica historia, este imponente recinto fue testigo de la presencia de personajes históricamente relevantes, como Abderramán III, el Cid, Jaume I, el rey Fernando de Antequera, el Papa Luna, San Vicente Ferrer, el príncipe de Viana y el general Cabrera. Sus acciones y palabras se entrelazan con la fascinante historia de Morella.
Al visitar el Castillo, podrás seguir los pasos de esta intrigante historia mientras asciendes hacia la Plaza de Armas, desde donde podrás contemplar una impresionante panorámica de las montañas que se extienden ante ti, con las casas morellanas a los pies del castillo, formando un enjambre de tejados rojizos. La experiencia de sobrevolar el cielo de Morella desde esta ubicación única es sencillamente inolvidable.
Palacio del Gobernador
Te invitamos a embarcarte en una apasionante visita al Palacio del Gobernador, una joya oculta dentro del majestuoso Castillo de Morella, que te transportará a los orígenes mismos de su historia.
Este palacio único ha sido construido ingeniosamente en el interior de una cueva, cuyos vestigios neolíticos han sido hallados, revelando la antigüedad de este fascinante lugar. Al adentrarte en sus entrañas, podrás disfrutar de la cautivadora exposición titulada “El Castillo, una historia de futuro”. Este emocionante viaje te permitirá explorar el pasado, trayéndote de vuelta al presente y proyectándote hacia el futuro del Castillo.
Se estima que el Palacio del Gobernador fue construido en el siglo XV y ha tenido múltiples funciones a lo largo de los siglos. Sirvió como residencia para el gobernador local y, al mismo tiempo, desempeñó un papel crucial como fortaleza defensiva para la ciudad. En la actualidad, el edificio ha sido cuidadosamente restaurado y transformado en un cautivador museo que alberga exposiciones fascinantes que revelan la rica historia del Castillo.
Al sumergirte en las intrigantes exposiciones, descubrirás los secretos del pasado, los avatares del presente y te inspirarás con las visiones del futuro que este emblemático Castillo abraza.
El Convento de San Francisco
El Convento de San Francisco, un tesoro histórico de Morella, está destinado a asumir un nuevo papel como el Parador Nacional de Turismo de la ciudad, complementado con otras edificaciones históricas adyacentes.
Este magnífico conjunto arquitectónico, erigido por la orden franciscana entre los siglos XIII y XIV, consta de tres elementos esenciales: la Iglesia, el Claustro y la Sala de Profundis.
La Iglesia del Convento, datada en el siglo XIV, se erige como un ejemplo de la belleza y sencillez del gótico original, al igual que los vestigios del claustro. En su interior, deslumbra una única nave central y capillas laterales que albergan los escudos heráldicos de las nobles familias que generosamente financiaron esta obra y que, posteriormente, obtuvieron el privilegio de ser sepultados en tan sagrado lugar.
La Sala Capitular o Sala de Profundis, fue un espacio destinado al velatorio de los frailes fallecidos. Actualmente, alberga una de las muestras más antiguas del arte macabro español: “La Danza de la Muerte”, una pintura del siglo XV que une a la nobleza, al clero y al pueblo en una reflexión común sobre la muerte.
Con la transformación en el Parador Nacional de Turismo, este emblemático Convento de San Francisco no solo preservará su rica historia, sino que también abrirá sus puertas a los visitantes para ofrecerles una experiencia única, donde la magnificencia del pasado se fusiona con el confort y la hospitalidad del presente.
Basílica Arciprestral Santa María la Mayor
La Basílica Arciprestal de Santa María la Mayor, una maravilla del gótico religioso, se alza como uno de los tesoros más hermosos del Mediterráneo. Su fachada cautiva a todos los visitantes con dos puertas de gran interés arquitectónico y escultórico: la de los Apóstoles y la de las Vírgenes.
Al adentrarnos en su interior, somos recibidos por deslumbrantes elementos artísticos. La escalera del coro, magistralmente enroscada en una de las columnas, es una verdadera muestra de habilidad y diseño. El transcoro impresiona con su escena del Juicio Final, y la bóveda del coro desafía las leyes de la arquitectura con su sorprendente rebajamiento.
La iglesia, con su característica piedra desnuda propia del estilo gótico, ofrece un interesante contraste con el altar mayor, de estilo churrigueresco, que enriquece la experiencia religiosa. Aquí, la eucaristía se acompañaba con el majestuoso órgano monumental, aún conservado, creado por Turull, perteneciente a la escuela Aragonesa y construido en 1719. Los más de 3.000 tubos de este órgano llenan el espacio con un sonido pleno y magnífico, especialmente durante el Festival Internacional de Música de Órgano que se celebra en Morella cada mes de agosto.
Además, la Basílica alberga un tesoro cultural en su interior: el Museo Arciprestal. En este espacio, se pueden admirar destacadas obras de pintura y orfebrería religiosa, que enriquecen aún más la experiencia de quienes la visitan.
Las Torres de San Miguel
Las Torres de San Miguel, un impresionante acceso principal a la ciudad de Morella, se alzan majestuosas como gemelas de base octogonal, cuya construcción data del siglo XIV. Estas imponentes torres forman parte destacada de la robusta estructura amurallada que abraza y protege la población.
Al adentrarnos en su visita, nos maravillaremos al explorar el interior de ambas torres y acceder a la terraza mediante un puente de enlace. Desde este privilegiado punto de observación, podemos disfrutar de vistas panorámicas que nos permiten apreciar la belleza de Morella desde las alturas. También podremos recorrer una parte del paseo de ronda de la muralla hasta llegar a la emblemática Puerta de la Nevera.
Además de su espectacular arquitectura, las Torres de San Miguel albergan interesantes exposiciones. Podrás admirar trabajos de piedra tallada, sumergirte en la nostalgia con una colección de maquetas de coches antiguos y contemplar fotografías históricas que retratan la ciudad en épocas pasadas. También encontrarás una detallada maqueta del conjunto de Morella, enriquecida con información sobre todas las torres y puertas de la muralla, ofreciéndonos un valioso contexto histórico y cultural.
El jardín de los poetas
El Jardín de los Poetas, uno de los tesoros más ocultos de la ciudad, ha sido redefinido como un espacio de homenaje a los destacados poetas vinculados con Morella.
Este encantador rincón se encuentra a los pies del Convento de San Francisco, y constituye un pequeño oasis donde los visitantes podrán descubrir la vida y obra de algunos de los grandes poetas del territorio. Citas inspiradoras de emblemáticas figuras como José Antonio Labordeta, Vicent Andrés Estellés, Carles Salvador, Joaquín García Girona, Pablo Guerrero o Carlos Gazulla De Ursino adornan este jardín, invitando a reflexionar sobre la belleza de las palabras y el poder de la poesía.
El Jardín de los Poetas brinda una atmósfera de serenidad y conexión con la naturaleza. Sus bancos invitan a los paseantes a reposar, disfrutando del entorno y dejando volar la imaginación al ritmo de las musas poéticas. Es un lugar que invita a deleitarse con el aire libre, encontrar sosiego y rendir tributo a la literatura y cultura local.
El paisaje de Morella
El paisaje de Morella, con sus más de 400 km², ostenta el segundo término municipal más extenso de todo el territorio valenciano. Este privilegiado espacio nos ofrece la oportunidad de sumergirnos en la generosidad de la naturaleza y disfrutar de una diversidad única. Un escenario de ensueño que se despliega ante nosotros, entre montañas, bosques, barrancos y espacios de una belleza cautivadora. Además, este entorno idílico está impregnado de un valioso patrimonio cultural y artístico, con ermitas, masías, puentes, construcciones y muros de piedra en seco, así como cruzando los caminos.
El ciclo natural en Morella es extraordinario debido a sus marcados contrastes. Desde la sobriedad del invierno y el regocijo de las nevadas, hasta la explosión de colores y fragancias que nos regala la primavera y el verano, con su gran variedad de hierbas aromáticas y flores silvestres. El otoño se muestra en estas montañas con sus tonalidades doradas, marrones, rojizas y ocres, junto al inconfundible aroma y sabor de las setas y la trufa. Un paisaje que invita al sosiego, a ser explorado y descubierto.
En cada rincón de las pedanías de Morella encontramos lugares que nos emocionan. Desde el Roser de Xiva hasta los bosques de La Pobleta, pasando por las majestuosas montañas de Herbesset, Ortells y su vegetación que bordea el cauce del río Bergantes. En este paraíso, podemos dejarnos llevar por la magia que destilan lugares como el río de Les Corses o Cérvol, los bosques de Vallivana, el encantador barranco del puente de la Bota, las fuentes de la Donzella y la Esperança, o los históricos poblados de La Llàcua y Salvassoria.
Pero Morella también se presenta como un punto de partida ideal para explorar los majestuosos paisajes naturales de la comarca de Els Ports. En su proximidad, aguardan la imponente Mola de la Garumba, entre Morella y Forcall, el sereno río Escalona que serpentea entre Herbers y Castell de Cabres, los impresionantes barrancos de Vallibona, las inconfundibles molas de piedra de Forcall, y los cautivadores rincones de Cinctorres, la Roca Roja, Roca Parda y la Rambla Celumbres. También podemos alcanzar la cumbre del Picaio en Vilafranca o dejarnos sorprender por la belleza de la Rambla de les Truites. Otro paraje natural de exquisita belleza, especialmente en otoño, es el Barranc dels Horts de Ares y la Tinença de Benifassà, Parque Natural declarado en 2006 que acoge a siete pequeñas poblaciones.
Fauna y flora
En las montañas y bosques de Morella, encontramos un extenso y diverso mapa vegetal que embellece estos espacios naturales. Carrascas, robles, arces, pinos negros, pinos carrascos, pinos albares, olmos, nogales, almendros, olivos, sabinas, chopos y una multitud de especies vegetales y arbustos se entrelazan en una armoniosa sinfonía de colores y aromas. Abundan las hierbas aromáticas y medicinales, como el romero, tomillo, espliego, manzanilla, poleo, zarzamora, boj, jara, espino blanco, endrino, enebro, aliaga, muérdago, hinojo, saúco, ajedrea, hiedra, acebo, madreselva y amapola, que añaden su encanto y valor ecológico a la zona.
En cuanto a la fauna, el cielo de Morella es un escenario donde se despliega una amplia variedad de aves. Desde majestuosas águilas reales y búhos reales hasta águilas culebreras, alimoches, lechuzas, abubillas, halcones comunes, cuervos, palomas y, en especial, el imponente buitre leonado, que surca los cielos en un vuelo majestuoso. Pero no solo el cielo está animado, en el territorio de Morella también encontramos otros fascinantes habitantes. La Cabra Hispánica y el jabalí son los animales con mayor población en esta tierra, compartiendo su hogar con el erizo común, el gato montés, topos, tejones, comadrejas, hurones, ardillas y zorros.
En este maravilloso entorno natural, la fauna y flora se entrelazan para formar un ecosistema lleno de vida y biodiversidad. La belleza y riqueza de Morella no solo se encuentra en sus monumentos y paisajes, sino también en la asombrosa variedad de seres vivos que habitan en sus montañas y bosques. Es un privilegio poder disfrutar y proteger este entorno único que nos ofrece una muestra de la maravillosa diversidad de la naturaleza.
Pinturas rupestres Morella la Vella
Descubre las impresionantes pinturas rupestres de Morella la Vella, un tesoro declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Estas obras de arte ancestral se encuentran a unos 6 km de Morella, en la histórica masía de Morella la Vella, que fue cuna de los primeros pobladores de estas tierras.
Sumérgete en la magia de este legado humano y maravíllate con el arte rupestre levantino que adorna estas paredes milenarias. Contemplarás cautivadoras escenas de caza y representaciones de estilo esquemático, cuidadosamente dispuestas en los abrigos rocosos. Cada trazo cuenta una historia ancestral, conectándonos con nuestros antepasados y su forma de vida.
Además de disfrutar de estas increíbles pinturas, el entorno que las rodea te invita a sumergirte en la naturaleza y el paisaje característico de la zona. Será una experiencia enriquecedora donde la historia y la belleza natural se entrelazan para transportarte a tiempos remotos y hacer que tu visita sea inolvidable.
Prisión de Morella
La Prisión de Morella tiene una rica historia que se remonta a la Edad Media, cuando era una de las tres grandes ciudades valencianas junto con Xàtiva y el Cap i Casal. Como Morella no tenía otro señor que el rey, el Justicia Mayor de la Villa ejercía tanto la jurisdicción penal como civil. La prisión contaba con diferentes celdas y dependencias, una para cada jurisdicción estamental: eclesiástica, militar y real.
El edificio de la prisión ha sido objeto de varias intervenciones a lo largo de los siglos debido a la inestabilidad del terreno arcilloso. Durante más de seis siglos, la prisión ha sido utilizada desde 1359, aunque aún estaba en construcción, hasta 1969, cuando Morella perdió su estatus de partido judicial. Posteriormente, la prisión fue destinada a oficinas, almacén y archivo.
Con la llegada del liberalismo después de la primera guerra carlista en 1840, Morella se convirtió en la cabeza del partido judicial y la antigua prisión medieval se transformó en la prisión del partido. Durante mucho tiempo, las condiciones en la prisión fueron insalubres y degradantes, pero durante la Segunda República, la directora general de prisiones, Victoria Kent, ordenó suprimir los grilletes.
Además de albergar a presos comunes, la prisión también recibió a guerrilleros antifranquistas. Morella se convirtió en un lugar de memoria donde estos guerrilleros y detenidos “desaparecían” en enfrentamientos o bajo la ley de fugas.
Museo de Dinosaurios
Descubre el fascinante universo de los dinosaurios y su historia en este museo, situado junto a la iglesia de Sant Miquel.
La tierra de Morella y Els Ports es rica en estratos formados entre el Jurásico Superior y el Cretácico Inferior, hace entre 146 y 98 millones de años. En ese entonces, estos valles estaban cubiertos por agua, lo que dejó valiosos restos de fauna marina y algas calcáreas. Durante el Cretácico, la evolución dio lugar a la formación de arcillas, una característica que ha permitido la presencia de numerosos restos de dinosaurios en la zona.
Los paleontólogos han explorado y descubierto estos tesoros durante décadas, destacando la especie más hallada y estudiada: el Iguanodon. En el museo, podrás maravillarte con una reproducción a escala real de este imponente animal que una vez habitó estas tierras. Pero eso no es todo, Morella alberga una rica variedad paleontológica que incluye desde terópodos carnívoros hasta enormes herbívoros, ornitópodos y acorazados.
El Museo Tiempo de Dinosaurios es un apasionante viaje al centro de la tierra, donde grandes y pequeños pueden explorar el emocionante mundo de la geología y la paleontología a través de la colección de fósiles del Cretácico.
Además, el museo ofrece una emocionante experiencia en forma de Escape Room que puedes disfrutar en familia o con amigos. A través de diversas pruebas que recorren todo el museo, deberás descifrar pistas para recuperar un mapa robado sobre el último yacimiento descubierto en la zona.
