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Pueblos de España que no te puedes perder: Santillana del Mar (Cantabria)
abr
España es un país lleno de historia, cultura y belleza natural. Desde sus grandes ciudades hasta sus pequeños pueblos, hay mucho por descubrir y explorar. En esta serie de artículos de blog, te llevaremos en un recorrido por algunos de los pueblos más encantadores y pintorescos de España. Desde la costa hasta la montaña, desde el norte hasta el sur, te mostraremos lugares únicos que merecen ser visitados. ¡Acompáñanos en este viaje por los pueblos más bonitos de España!
Hoy descubriremos la villa de las tres mentiras, un tesoro histórico y artístico en Cantabria: Santillana del Mar.
Santillana del Mar es un municipio y una villa de la comunidad autónoma de Cantabria. Se encuentra en la costa occidental de Cantabria, comarca de la que es su extremo este. Se la conoce popularmente con el sobrenombre de la villa de las tres mentiras, puesto que según el dicho popular «ni es santa, ni llana, ni tiene mar».
Santillana del Mar es una de las localidades de mayor valor histórico-artístico de España y el principal foco de atención turística de Cantabria. Entre sus calles empedradas flanqueadas por casitas con balcones de madera repletos de flores y fachadas con blasones familiares esculpidos, destacan lugares como la Colegiata de Santa Juliana o el Palacio de los Velarde.
Además, Santillana del Mar cuenta con otros lugares turísticos como la Cueva de Altamira y arte rupestre paleolítico de la cornisa cantábrica. También se puede visitar el Museo Y Fundación Jesús Otero y el Museo del Barquillero.
La Colegiata de Santa Juliana
La Colegiata de Santa Juliana es una iglesia construida a principios del siglo XII y una de las joyas del románico del país. Está situada en el mismo casco urbano de Santillana, llegando a ella tras atravesar la villa. La iglesia presenta planta basilical, con tres naves, de las cuales la central es ligeramente más ancha. Las naves se rematan en ábsides semicirculares. En la fachada sur se levanta una torre circular. La colegiata fue declarada Monumento Nacional de España el 12 de marzo de 1889.
La colegiata es un lugar muy visitado por turistas y peregrinos que recorren el Camino de Santiago. Además de su valor arquitectónico y artístico, la colegiata es conocida por su historia y leyendas. Una de las leyendas cuenta que la colegiata fue construida por un grupo de monjes que trajeron las reliquias de Santa Juliana desde Constantinopla. Otra leyenda cuenta que la colegiata fue construida por los templarios.
Abre todos los días del año salvo los lunes, Navidad,Año Nuevo y Reyes. El horario es de 10 a 13 y de 16 a 18 en invierno (16 a 19 en verano). La entrada son 3€ por persona y los niños menores de 12 años acompañados de un adulto son gratis.
Museo y Fundación Jesús Otero
El museo cuenta con una colección permanente de obras del escultor Jesús Otero, así como exposiciones temporales. Además, el museo organiza actividades culturales como conciertos, conferencias y talleres.
El edificio que alberga el museo es una casona montañesa del siglo XVIII que fue restaurada para su uso como museo. El museo se divide en dos plantas y cuenta con una superficie expositiva de 500 metros cuadrados. La colección permanente del museo está compuesta por más de 200 obras de Jesús Otero, entre las que se encuentran esculturas en piedra y bronce, dibujos y grabados.
El horario de visita al museo es de martes a domingo de 10:30 a 14:00 horas y de 16:00 a 19:00 horas. La entrada general cuesta 3 euros y la reducida (para estudiantes y mayores de 65 años) cuesta 2 euros.
Palacio de los Velarde
El Palacio de los Velarde se encuentra en la plaza de las Arenas junto a la Colegiata de la villa histórica de Santillana del Mar (Cantabria). Fue edificado por Alonso de Velarde a mediados del siglo XVI en estilo renacentista, como se aprecia en la fachada principal, situada al este, con soportal, balcones y escudos. Era hermano menor de Rodrigo Fernández Velarde, que construyó la casa del Cantón en la misma villa, e hijo de otro Rodrigo o Ruy Fernández Velarde y de María Fernández de Villa, patronos de la capilla de San Juan de la Colegiata, que testaron en 1528.
El palacio ha sido objeto de varias reformas y ampliaciones a lo largo de los siglos. En el siglo XVIII se añadió una torre y se reformó el interior del edificio. En el siglo XIX se construyó un nuevo cuerpo de edificio adosado al palacio original.
Actualmente el palacio es propiedad privada y no está abierto al público. Sin embargo, puedes disfrutar de su arquitectura desde el exterior.
El Museo del Barquillero
El Museo del Barquillero es una casita tradicional montañesa que se encuentra en la calle del Río 19, junto a la Colegiata, en Santillana del Mar. En su planta baja se encuentra una pequeña tienda y en la planta superior un original museo. El museo dispone de una boutique especializada en la que se podrán adquirir regalos, juguetes y distintas variedades de barquillos y licores.
El museo es un lugar entrañable que muestra la historia de los barquilleros de Santillana del Mar. El barquillo es un dulce típico de la zona que se elabora con harina, azúcar y huevos. La historia de los barquilleros se remonta al siglo XVIII cuando los habitantes de Santillana del Mar comenzaron a elaborar este dulce para venderlo en las ferias y mercados de la región. Los barquilleros eran personas humildes que recorrían los pueblos de Cantabria vendiendo sus productos.
El Museo del Barquillero es un homenaje a estos trabajadores y a su oficio. En el museo se pueden encontrar objetos relacionados con la elaboración y venta de los barquillos como moldes, utensilios de cocina y fotografías antiguas. También hay una exposición de juguetes antiguos que hará las delicias de los más pequeños.
El museo es un lugar ideal para visitar en familia ya que ofrece una experiencia única para conocer la historia y tradiciones de Cantabria.
Cueva de Altamira y el arte rupestre paleolítico de la cornisa cantábrica
La cueva de Altamira, a unos 23 km de Santillana del Mar, es una cavidad natural en la roca en la que se conserva uno de los ciclos pictóricos y artísticos más importantes de la prehistoria. Forma parte del conjunto “Cueva de Altamira y arte rupestre paleolítico de la cornisa cantábrica”, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco.
El arte rupestre paleolítico de la cornisa cantábrica es un conjunto de 18 cuevas situadas en diferentes regiones del norte de España que son representativas del apogeo del arte rupestre paleolítico, desarrollado en Europa entre los años 35 000 y 11 000 a. C. Las cuevas están distribuidas en tres comunidades autónomas diferentes: diez de ellas en Cantabria, cinco en Asturias y tres en el País Vasco.
La cueva de Altamira es una de las más importantes del conjunto por la calidad y cantidad de sus manifestaciones artísticas. El ciclo pictórico que se conserva en su interior está formado por más de 20 figuras animales y humanas pintadas con pigmentos naturales sobre las paredes y techos de la cueva. La técnica utilizada para su realización es el trazo lineal y el sombreado con pigmentos rojos, negros y ocres.
El descubrimiento de la cueva de Altamira tuvo lugar en el año 1868 por casualidad cuando un cazador localizó la entrada a la misma. Sin embargo, no fue hasta el año 1879 cuando se realizó el primer estudio científico del lugar por parte del arqueólogo Marcelino Sanz de Sautuola. Desde entonces, la cueva ha sido objeto de numerosos estudios y excavaciones que han permitido conocer mejor su historia y sus manifestaciones artísticas.
El arte rupestre paleolítico de la cornisa cantábrica es un testimonio excepcional de los grupos humanos del Paleolítico de la Europa meridional. Los valores excepcionales y universales reconocidos por la UNESCO en 1985 para la cueva de Altamira se extienden a otros 17 sitios con arte rupestre paleolítico de la región Cantábrica, que fueron inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial en 2008 como ampliación de Altamira.
